Aquí estamos de nuevo, esta vez he tratado de recrear otro de los maquillajes de Rowi pero en mí misma. Es que eso de trabajar con los hermanos a veces crea roces jaja. Así que nada, para evitar mayores conflictos, y porque ya era hora (hacía bastante tiempo que no dedicaba tiempo a probar nuevos maquillajes), me puse manos a la obra.
El maquillaje que elegí para esta ocasión fue el siguiente:
Sinceramente lo escogí porque dije va, no será para tanto. A simple vista parece que llega una sombra en los ojos de color verde clarito, un poco de color en los labios y eso sí, mucho mucho abalorio.
El resultado fue el podéis apreciar abajo. Sinceramente, no se si me siento muy contenta con el resultado. No sé si es por el maquillaje en sí, que claramente, no llega a ser el mismo que el de ella, porque tampoco se aprecia bien en la foto el maquillaje que me hice o porque a pesar de mis esfuerzos no lo conseguí como esperaba. Quizá me estaba enfocando demasiado en quedar como ella, en lucir como ella y no, somos dos personas completamente distintas. Tanto física como psicológicamente, es decir la manera en la que yo hago las cosas nunca será la misma que la de otra persona. Y él como me quedan las cosas tampoco será lo mismo que para otra. Además, solo a mi se me ocurre creer que con lo poco que sé de maquillaje podría conseguir que luciera tan profesional y perfecto como el de ella.
Creo que aquí es donde entran en juego las grandes expectativas que me formo en mi cabeza, menos mal ya os había comentado que es algo que me suele pasar. El que avisa no es traidor.
Bueno, supongo que de todo se aprende y se mejora. Como dicen por ahí, la experiencia hace al maestro.
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